- BLOG -

ARTE CON PAPEL ESCOLAR

img-example

El juego como aprendizaje

La etapa de la infancia es básica para la formación global de cualquier persona y esta se ve rodeada de juegos y canciones lo que nos hace personas más felices y nos facilita el aprendizaje posterior. Hay muchos autores que hablan de la importancia del juego como aprendizaje y sabemos que uno de los principales fue Jean Piaget, ya que para el este estimula el desarrollo de los niños y desarrolla un nivel de madures propio que representa el esquema de como ve el mundo y hace que asimile conductas nuevas y las adapte a sus esquemas de acción, los cuales va perfeccionando. Para Piaget, las actividades lúdicas tienen las siguientes categorías: • Juegos de ejercicio • Juegos simbólicos • Juegos de reglas • Juegos de construcción Según este autor también “El juego es el producto de la asimilación que se disocia de la acomodación antes de reintegrarse a las formas de equilibrio permanente, que harán de él su complementario en el pensamiento operatorio o racional. En ese sentido, el juego constituye el polo extremo de la asimilación de lo real al yo. Participa al par, como asimilador, de esa imaginación creadora que seguirá siendo el motor de todo pensamiento ulterior y hasta la razón”. Para los niños jugar es la forma en que exploran el mundo y los seres que lo rodean, ya que realmente no se dan cuenta, es algo que los divierte hacer de forma natural aprenden. Hacer juegos con nuestros alumnos es la forma más divertida para educarlos y transmitirles diferentes valores. El juego, como elemento primordial en las estrategias para facilitar el aprendizaje, se considera como un conjunto de actividades agradables, cortas, divertidas, con reglas que permiten el fortalecimiento de los valores: respeto, tolerancia grupal e intergrupal, responsabilidad, solidaridad, confianza en sí mismo, seguridad, amor al prójimo, fomenta el compañerismo para compartir ideas, conocimientos, inquietudes, todos ellos – los valores- facilitan el esfuerzo para internalizar los conocimientos de manera significativa. Favorece el crecimiento biológico, mental, emocional – individual y social. Además se puede jugar de diferentes formas: Juegos con el cuerpo, con las palabras, con los números, con objetos, con otros, con la imaginación, con los idiomas, etc. y permite desarrollar diferentes capacidades: Físicas: para jugar los niños tienen que moverse, sin darse cuenta se ejercitan y desarrollan su coordinación psicomotriz, la motricidad gruesa y la fina. El juego físico es muy saludable para su cuerpo ya que intervienen músculos, huesos, sus pulmones y su corazón y esto además les permite dormir bien. Desarrollo sensorial y mental: Los sentidos son parte primordial en el aprendizaje por lo que estos intervienen en los juegos desarrollan ligas entre lo sensorial y mental. Con estos juegos pueden conocer y diferenciar los colores, las formas, texturas y tamaños. Juegos con relaciones afectivas: en los juegos se experimentan diferentes emociones como la alegría, la expectación, la sorpresa, así como solución de dudas o conflictos que se dan entre los participantes y les ensaña a relacionarse afectivamente con sus compañeros y enfrentar al equipo contrario, ayudándoles a resolver situaciones cotidianas. Creatividad e imaginación: el juego es el principal motivador de la creatividad y la imaginación, les permite desarrollarlas libremente; se vale imaginar y crear lo que les da seguridad en este proceso. Formación de hábitos de cooperación: para poder jugar se necesita de un compañero o de varios compañeros lo que les ayuda a la convivencia social y a sentirse parte de un grupo. Capacidad de Conciencia corporal: El juego hace que los bebés y niños pequeños aprendan a conocer su cuerpo, los límites de él y su entorno. Cada vez más Escuelas incorporan dentro de todos sus programas y materias juegos que hacen las clases más dinámicas, en las que los niños aprendan naturalmente y no forzados a aprender cosas de memoria que después las olvidan porque no las entienden realmente. Al jugar los niños imaginan, crean y entienden reglas, respeto, interacción y se motivan para ganar el juego, que es parte de la vida. Hay que hacer clases motivadoras, que cada día se aprenda de diversas formas y que los niños vayan gustosos a las clases, que realmente aprendan y se desenvuelvan; así también los maestros se convierten en personas más creativas y felices. Dentro de estos juegos se aplican también las artes manuales que brindan grandes beneficios en cuanto a psicomotricidad, motivación y diversión.